Con firma de su presidente, Fabian Messina, la ONG Posada del Inti publicó una carta donde anunció su quiebre ante las dificultades económicas que enfrentan para poder sostener sus sedes que funcionan como centros residenciales y de día para personas con consumo problemático de drogas, víctimas de violencia de género y personas con vulnerabilidad social.
«Nos encontramos en un momento de quiebre debido a la inviabilidad que le fue señalada en reiteradas oportunidades a la gestión anterior y lo sucedido en el último mes, que hace que esto no dé para más, resultando insostenible», comienza relatando Messina en el texto.
En el escrito, la ONG expone que enfrentó en la renuncia de más de 20 miembros del equipo de atención entre los que se encuentran psicólogos, trabajadores sociales, operadores y administrativos. Estas bajas se dieron «por motivos netamente económicos» lo que hace que el dispositivo se vea imposibilitado para «llevar adelante los compromisos asumidos con los usuarios derivados por el Sedronar«.
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Video: un Fiat Uno chocó contra un auto estacionado, lo destruyó y huyó - Un vecino del barrio Bernardino Rivadavia no puede creer la situación que está atravesando. Este… Ver nota >En detalle, las renuncias surgieron al convertirse en «inviable» la propuesta económica de pago para los profesionales «dentro del mercado laboral», lo que dio como resultado «equipos diezmados, agotados a causa de la sobrecarga laboral y por supuesto atravesados por iguales problemáticas económicas«.
«Consideramos fundamental la incorporación de distintas miradas profesionales, y de las exigencias que son requeridas, muchas de las cuales en Posada del Inti se llevaban adelante históricamente», señala la ONG en la carta.
El dispositivo donde se brindan tratamientos residenciales y ambulatorios de calidad, se sustenta en varios ejes: lo profesional, lo edilicio, la alimentación, las responsabilidades administrativas y la responsabilidad de proveer la medicación clínica y psiquiátrica a los usuarios residenciales. «El valor de la beca es de $153.000, donde hay esquemas de medicación, por trabajar con los usuarios más complejos entre $40.000 y $60.000, quedando un promedio aproximado de unos $100.000, es decir, hablamos de $3.333 por día para brindar alojamiento, desayuno, dos colaciones, almuerzo, merienda y cena, esto supervisado y armado por una nutricionista», explican en la publicación.
«Cualquiera que mínimamente entienda de números, ve que llevar adelante con estos valores una organización es definitivamente inviable. Por tal motivo desde noviembre, venimos dando a conocer esta situación con distintos actores de la política local, provincial y nacional», analizó Messina y aseveró que «no queda más tiempo posible de espera en pie».
La organización espera la asunción de nuevas autoridades a nivel nacional en el Sedronar para evaluar la existencia -o no- de voluntad política para sostener el único dispositivo en 400 kilómetros a la redonda en el que existen 49 camas habilitadas «producto de un excelente trabajo realizado en conjunto con la subsecretaría de Salud Mental, Consumos Problemáticos y las Violencias de la provincia de Buenos Aires».
«Estamos expectantes, esperamos que no quede en una mera expresión de deseo, sino que haya una financiación adecuada para que podamos seguir trabajando por y para las personas que se encuentran en tratamiento atravesadas por la problemática del consumo«, finaliza el mensaje.
