El Sindicato Marítimo de Pescadores (Simape) demostró su preocupación y rechazo a la «ley ómnibus» enviada por el Presidente de la Nación, Javier Milei, al Congreso, donde se habla específicamente de la actividad pesquera.
En el proyecto que será debatido en la Cámara de Diputados propone modificaciones en los permisos que rigen a la industria de la pesca y establece que las cuotas de captura se asignarán por un sistema de licitaciones internacionales.
Al respecto, el secretario general de Simape, Pablo Trueba, adelantó que estas medidas generarán pérdidas de fuentes de empleo y remarcó que la pesca puede quedar «en manos extranjeras».
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«En el caso de las licitaciones internacionales pueden venir capitales chinos, por ejemplo, comprar todos los permisos y quedarse con la pesca argentina. En consecuencia, las empresas nacionales que ya están instaladas podrán tener toda la estructura, pero no podrán salir a pescar si el dueño del pescado es otro. Le puede pasar a cualquier empresa, sea grande o chica”, detalló.
En esa misma línea, agregó que «los empresarios argentinos que vienen trabajando desde hace años pueden tener todo, como la capacidad operativa, frigorífico, el personal y los barcos; pero no tendrán lo principal, que es la cuota de captura«.
«Por ende, le quedará negociar con quien la licitó o terminar vendiéndole todo. Eso generará claramente una gran pérdida de fuentes de empleo», expresó Trueba.
Además, el gremialista también nombró que actualmente los buques chinos se encuentran al borde de la Zona Económica Exclusiva (donde Argentina tiene derechos especiales en relación con la exploración y el uso de los recursos marinos). «Si estas medidas del gobierno se ponen en práctica y ellos ganan la licitación, que la ganan poniendo dinero y lo tienen, se quedarían con las capturas por 20 años. Los capitales chinos serían los dueños de la pesca argentina porque nuestro país dejaría de tener un manejo directo de la misma», advirtió.
Al sindicato, esta situación le parece un «horror», ya que «licitar internacionalmente la pesca no tiene sentido». «Eso se haría si en nuestro país no hubiera interesados en invertir y vienen capitales de afuera. En la pesca no es así, en su mayoría hay empresas argentinas, algunas son mixtas, pero la pesca es nuestra. Esto que propone el gobierno nos preocupa mucho porque afecta al trabajador y, por si fuera poco, perderíamos las capturas de pescado por 20 años», dijo Trueba.
En otro orden, y en relación al anuncio del gobierno nacional que establece que los productos de la pesca quedarían alcanzados por un aumento del 15% en los derechos de exportación, el titular del Simape explicó: «Esa situación también nos impacta directamente a los pesqueros porque los convenios colectivos de trabajo están dolarizados. Claramente afectará en los ingresos de los trabajadores».
