El intendente Guillermo Montenegro presentó un recurso de revocatoria ante el gobierno provincial para que quede sin efecto el nuevo convenio colectivo de los y las trabajadoras municipales, que fue registrado a principio de este mes por el Ministerio de Trabajo de la provincia.
En un escrito dirigido a Juan Pablo Lorenzo, director de Negociación Colectiva, el intendente y el secretario de Legal, Técnica y Hacienda, Mauro Martinelli, rechazó el acuerdo firmado en 2017 entre el STM y el entonces intendente Carlos Arroyo.
En el texto, que se dio a conocer el mismo día en que Montenegro le aumentó el sueldo a los municipales por decreto, el municipio remarcó cómo se gestó ese acuerdo, pero hizo énfasis en que pasaron más de siete años desde que lo presentaron en el Ministerio: fue el 2 de mayo de este año que se registró en la cartera laboral.
A su vez, a lo largo de las 87 páginas que constituyen el documento, el municipio marcó punto por punto las diferencias del nuevo convenio con respecto al vigente.
El jefe comunal volvió a detallar los ejes que criticó durante la última conferencia de prensa: los cargos heredados, la obligatoriedad de ascender a personas que están cerca de jubilarse o la contribución patronal.
Ahora, el gobierno provincial debe resolver si da marcha atrás con la registración del convenio o si lo sostiene y la discusión pasa al Concejo Deliberante.
