Tras las fuertes críticas al Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) de los empleados municipales que realizó ayer el intendente Guillermo Montenegro en su conferencia de prensa, el coordinador regional del Ministerio de Trabajo, Raúl Calamante, declaró a Canal 8 que no sabe «de qué se sorprende», si el convenio fue presentado por el exintendente Carlos Arroyo, que era «de su mismo color político».
El fastidio de Montenegro radica en que el CCT fue presentado en el Ministerio de Trabajo en 2017 por el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) y Arroyo y recién se aprobó hace pocos días, siete años después. Además, en uno de sus apartados sostiene que si un trabajador municipal fallece, un familiar puede ocupar su puesto.
«En principio, como Ministerio de Trabajo nuestra función es simplemente registrar un convenio colectivo colectivo entre las partes. En este caso, el municipio de General Pueyrredon y los trabajadores a través de su organización sindical. La propuesta, el proyecto, el borrador y la presentación la hizo el STM y el gobierno de Arroyo, inclusive del mismo color político del intendente actual. Por lo tanto, no sé de qué se sorprende Montenegro sobre este convenio», expresó Calamante.
«Cargos hereditarios, 18 licencias nuevas y puestos inventados»: las críticas de Montenegro al nuevo convenio de municipales
Balance del fin de semana: el municipio atendió complicaciones por el temporal y diversas infracciones - Entre el jueves y el lunes inclusive, el Cuerpo de Patrulla Municipal (CPM), Tránsito, Prefectura,… Ver nota >
Lastimó a su hermano y amenazó de muerte a su mamá con un cuchillo - En la tarde de este domingo, un sujeto de 41 años se encontraba junto a… Ver nota >Luego aclaró que existe una ley provincial que regula el trabajo municipal, además de las constituciones a nivel nacional y provincial, que «marcan un piso de derecho» para que haya acuerdos entre las partes.
«En el caso concreto de que ante el fallecimiento de un trabajador municipal un familiar pueda ocupar ese lugar en el cargo más bajo, se trata de uno de los puntos que aparecen en muchos convenios y hace muchos años«, explicó Calamante.
Por lo tanto, dijo que «les sorprende que Montenegro se sorprenda» y que no conozca estas cuestiones «si viene de la Justicia».
«A mí me huele más a que es una chicana, una intención de tener un posicionamiento político de confrontación. Se para en el desconocimiento de un sector amplio de la población y con otro sector que tiene una mirada muy antagónica con lo que es el empleo público», añadió.
Calamante aseguró que todo se desarrolla en un contexto donde los empleados reclaman por una recomposición salarial. «Me parece que lo mejor es que las partes se sienten a discutir para buscar una solución. Meter todas estas cuestiones pretende correr una discusión que no va a llevar a ningún lado«, expresó.
