Una mujer que intentó vender su casa vivió una verdadera pesadilla: los supuestos compradores eran delincuentes armados que la maniataron y la despojaron de dinero y distintos elementos de valor.
El hecho ocurrió el sábado pasado en Bosque Alegre. Los supuestos compradores coordinaron una visita a la vivienda con un representante de la franquicia Remax y llegaron hasta la vivienda en venta.
Una vez dentro de la casa, los delincuentes (un hombre mayor y una pareja más joven) ataron con precintos a la vendedora y a la dueña de la casa, los arrodillaron y los amenazaron con el revólver en la cabeza y otras partes del cuerpo.
Los delincuentes huyeron con dinero, joyas, carteras y otros elementos de valor. Desde el Colegio de Martilleros le apuntaron a la representante de Remax por no haber verificado la identidad de los compradores. «Eso denota la falta de control, gestión y responsabilidad de la mencionada empresa», indicaron.