Los comedores y merenderos de Mar del Plata vienen, mes a mes, enfrentando dificultades cada vez más grandes: es que los precios suben, el gobierno recorta y el desempleo azota a las familias que, en los distintos barrios, no cuentan con sustento y recurren a la ayuda social para poder comer.
Los valores de los alimentos dificultan las donaciones de particulares, y el Gobierno tanto Municipal como Nacional dejó de enviar alimentos secos a estos lugares que se ocupan de brindar al menos una comida al día a cientos de personas.
Frente a estas cuestiones y a la falta de respuestas, las responsables de los distintos comedores o merenderos marplatenses evalúan, por primera vez desde su inauguración, cerrar sus puertas: ya les resulta imposible seguir negándole alimentos a las personas que más lo necesitan.
La olla, vacía: comedores barriales dejan de dar alimentos por las fuertes subas
Balance del fin de semana: el municipio atendió complicaciones por el temporal y diversas infracciones - Entre el jueves y el lunes inclusive, el Cuerpo de Patrulla Municipal (CPM), Tránsito, Prefectura,… Ver nota >
Mi Amigo Invencible toca en Club Tri: presenta un adelanto de su noveno disco - Mi Amigo Invencible, el sexteto que nació en Mendoza en 2007, vuelve este sábado a… Ver nota >La negativa no es arbitraria, es que no hay nada: no hay donaciones, no hay aportes, no hay ayuda. Nada llena las ollas, que día tras día y noche tras noche siguen vacías, esperando preparar otra vez las viandas que supieron cocinar.
El merendero -hace unos años, comedor- «Las Hormiguitas«, evalúa desde hace tiempo oficializar su cierre. Funciona en el barrio Las Heras hace 16 años, y jamás, aseguran, se enfrentaron a una situación similar.
Al lugar asisten 130 familias, que, hasta que se volvió imposible, retiraban sus viandas o asistían a las meriendas que, con amor y dedicación, preparaban Roxana y Abigail, las responsables del espacio ubicado en Calabria 8456.
«Ya no recibimos mercadería de ningún lado. Las personas vienen a retirar comida y no reciben nada», relataron con angustia a Canal 8. «Estamos pidiendo donaciones para seguir adelante y que la gente pueda llevarse viandas», explicaron.
Según expresaron, la situación les genera «mucha tristeza» al «no poder darles nada cuando vienen y golpean hasta para pedir un poco de pan». «Nosotras empezamos como un merendero, y en pandemia empezamos a hacer viandas. Es realmente un orgullo que el lugar empezó siendo para niños y ahora entregábamos viandas a mamás, abuelos, pero hoy por hoy no estamos funcionando«, agregaron las referentes.
El espacio se sustentaba a base de donaciones de distintos comercios, vecinos y los alimentos que les brindaba la sede del ministerio de Desarrollo Social que, hasta hace algunas semanas, funcionaba en el Unzué.
«La gente ahora necesita mucho«, expresaron, aunque también dijeron «no esperar nada bueno» del futuro económico. «Esperamos que esto llegue a gente que pueda hacer donaciones para que podamos armar las viandas y que la gente del barrio pueda tener un plato de comida en su hogar para irse a acostar con el estomago calentito», agregaron con ilusión.
Para donar alimentos o colaborar con «Las Hormiguitas» está a disposición el teléfono 223-6991254 y también el Facebook «Merendero Las Hormiguitas«.
