El acto en conmemoración al aniversario número 42 del Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas convocó a cientos de personas que se reunieron al rededor del Monumento a los Caídos para acompañar a los ex combatientes, familiares, vecinos y autoridades municipales.
Ya en el lugar, y luego de entonar el Himno Nacional, el primero en tomar la palabra fue el intendente municipal Guillermo Montenegro, que, con emoción, recordó el motivo del encuentro, reconoció a los ex convictos marplatenses y se tomó unos minutos para dedicarle unas palabras a Ricardo Akins, «uno de los primeros argentinos que desembarcó en las Islas Malvinas» que fue asesinado hace pocos días en su puesto de trabajo como custodio de seguridad.
Por su parte, el presidente del Centro de Ex Combatientes en Malvinas recorrió la historia de estos 42 años, agradeció y valoró el trabajo de los hijos y nietos para mantener viva la historia pero se ocupó de resaltar que el Gobierno nacional «debe modificar su política exterior» en protección de la soberanía nacional.
«La emoción no tiene que ver sólo con el 2 de abril, desde hace 42 años, sino tiene que ver con estar con nuestros héroes desde un lugar distinto, que son muchos de los que están acá y que uno ve todos los días. El centro de ex combatientes cumple 40 años y es ejemplo por el cuidado que tuvieron entre ellos y con sus familias y como, entendiendo que esto tiene que seguir, ahora lo transforman con sus hijos y sus nietos«, relató el intendente Montenegro. «Esto habla de una vocación de mantener viva la historia de Malvinas y de ayuda y compromiso con la comunidad», agregó.
«Agradezco a las familias, los amigos, los hijos y los nietos que mantienen viva la llama de una parte trascendental de la historia de los argentinos. Me llena de orgullo participar como intendente, pero mi compromiso como marplatense con la causa de Malvinas va ser para toda la vida«, finalizó.
En tanto, el presidente del Centro de Ex Combatientes en Malvinas, José María Lambertini, tomó la palabra para señalar que «los soldados somos la historia viva del transitar y el crecer de nuestra ciudad».
«Cuando en el futuro se hable del Saladero, de los Jesuitas, también se dirá que esta ciudad entregó sus hijos a la patria. Hijos que caminaron estas calles, aprendieron a nadar en estas playas: un tercio de la historia de nuestra ciudad no es poca cosa», repasó con emoción.
«Todas las unidades de las Fuerzas Armadas con asiento local aportaron personal al conflicto, que partieron al combate desde aquí. Mar del Plata tiene héroes que realizaron el mayor sacrificio que un hombre puede hacer por su patria: dejaron su vida en Malvinas y en este lugar están sus nombres para la posteridad», reflexionó Lambertini.
A mitad de su discurso, el ex combatiente se tomó un momento para analizar la situación actual que vive el país en torno a la causa Malvinas y dijo que todo el Centro esta «sorprendido» por «la actitud de las nuevas autoridades recientemente electas para con la causa, hay una especie de parálisis diplomática que afecta a la política exterior argentina«.
«Mientras que el Reino Unido aumenta el área de restricción al rededor del archipiélago, realiza maniobras bélicas y se repliegan nuestros recursos, no hay una posición firme del poder nacional por el reclamo de soberanía frente a la creciente militarización y la construcción de un puerto de aguas profundas que proyecta el imperio británico sobre la Antártida».
En tanto, agregó que tenemos «un presidente admirador de Margaret Thatcher». «Lamentamos profundamente el deterioro de la defensa de nuestra soberanía e instamos al Gobierno nacional a modificar el rumbo de su política exterior«, sentenció en nombre de todo el Centro de Ex Combatientes local.
«Nuestros hijos y nietos dieron continuidad al amor que ha sido el motor de cada uno de nosotros todo este tiempo. A ellos nuestro agradecimiento más grande. Nos hemos impuesto la misión de no olvidar los nombres que rodean esta fuente, son nuestra inspiración en todos estos años», finalizó Lambertini.
