La familia del parricida Uriel Saín viven horas muy difíciles. Luego de que el joven haya matado a su madre y a su abuelo, se fugó del psiquiátrico, donde permanecía internado. A pocos metros, en el HIGA, permanece internada su abuela, a quien también intentó matar el día de los trágicos hechos.
“Lo primero que quiero aclarar es que él logró escapar del nosocomio donde estaba, enfrente se encuentra internada mi mamá, quien no tiene custodia. Nos negaron poder quedarnos ahí”, dijo Marcela, una de las hijas de la mujer que permanece internada y tía del parricida.
“No cuenta con la custodia necesaria para poder llevar esta situación. La sociedad corre riesgo, no solamente nosotras. Mi mamá tenia una fisura en el riñón, aparentemente le van a dar el alta pasado mañana”, relató en Mardel Directo.
Balance del fin de semana: el municipio atendió complicaciones por el temporal y diversas infracciones - Entre el jueves y el lunes inclusive, el Cuerpo de Patrulla Municipal (CPM), Tránsito, Prefectura,… Ver nota >
Los repartidores tendrán un botón de alerta para reforzar la seguridad - La Secretaría de Seguridad se reunió con representantes de aplicaciones de delivery, como Rappi y… Ver nota >Asimismo, Marcela indicó que ellas no tenían conocimiento del problema de adicción de su sobrino y hasta hace unos días la relación entre ellos era la de una familia normal. Recién unos días antes de los asesinatos lo notaron un poco aislado.
“Él vivió y se crió con nosotras. Mi hermana y él vivían con nosotras, en la misma casa. Mis papás le dieron todo, éramos una familia normal”, destacó y agregó: «Hace unos días vino con mi papá a colocar un televisor a mi casa».
“Fue todo muy repentino, estamos shockeados, no reconocemos que sea nuestro sobrino, tenemos miedo y que mi mamá esta totalmente desprotegida”, finalizó la mujer.
Por otro lado, su pequeño hijo de cinco años fue testigo de todo lo que sucedió en esa casa. «Él pudo escapar junto con mi mamá que le gritaba «corré», recién estos días pude hablar con él sobre lo que había pasado», dijo Marcela, mamá del pequeño.
