Mateo no lo puede creer. O sí, porque asegura que la temporada fue desastrosa en términos de seguridad: a casi todos los de la cuadra los asaltaron al menos una vez. Sin embargo, este jueves le volvió a tocar a él despertarse sobresaltado con el llamado de un vecino, que le avisaba que le habían intentado entrar de nuevo al estudio de diseño y muebles que funciona en Padre Dutto y Juan B Justo.
“Es la novena o décima vez que nos pasa. Rompen el vidrio, entran, pero no se llevan nada. Es la segunda vez que la alarma no nos suena. La reposición del vidrio nos duele, tanto como el daño psicológico que esto genera”, reconoció Mateo a Canal 8.
Aunque confiesa haberlo pensado un par de veces, también advierte no estar en condiciones de cerrar «Stocolmo». “Tenemos que seguir laburando, no podemos cerrar. Hemos evaluado una reja, pero es muy cara por los vidrios que tiene. Cada vez que pasa pensamos en cerrar, en ir a un lugar a puertas cerradas, pero necesitamos mostrar”, razonó.
Sobre la presencia policial en la zona, en pos de aplacar las posibilidades de robo o violencia, Mateo fue contundente: “Nos defendemos entre vecinos. Acá hay robos seguidos, en la zona, en la manzana. es impresionante. A la chica del quiosco le robaron con un cuchillo hace unos días. Y pese a eso, la presencia policial es poca”, completó el comerciante.
