Este sábado, el cuerpo de Nahuel Lagos no aguantó más y finalmente murió -a sus 20 años- en una cama del Hospital Interzonal. Familiares y amigos de este joven, que producto de una feroz golpiza policial quedó cuadripléjico en agosto de 2023, reclaman justicia y piden que los efectivos “vayan presos”.
“Le dieron una paliza acá, en Batán, lo de la comisaría 8va. El nene no estaba robando, no estaba haciendo nada. Estaba sacando cosas de una bolsa de basura. Le dieron una golpiza y lo largaron. Él no quedó bien por los golpes. Con sus dolores y todo, él andaba. Pero el 30 de agosto se cayó y en la caída se terminó de estropear la médula. Quedó en el hospital, cuatro días en comida y tres meses en terapia intensiva. Estuvo yendo al Inareps, pero de las lesiones nunca se recuperó”, contó Mariana, madrastra de Nahuel.
Según continuó el relato, el viernes pasado lo llevaron como siempre al Instituto de Rehabilitación de ruta 88 y no el joven no pudo hacer nada: se sentía descompensado. “Nos tuvimos que internar en el Higa y el sábado, cuando fuimos a buscar el parte médico, nos explicaron que él había entrado muy descompensado, que tenía una infección grave y que no podían hacer más nada por él”, lamentó la mujer.
En esa línea, tras el fallecimiento de Nahuel, los familiares y amigos del joven exigen justicia. “Lo único que queremos es que estos oficiales estén presos, porque nos hemos enterado que siguen golpeando chicos y que siguen en actividad. No es justo. A nosotros nos arruinaron la vida y dejaron a una bebé de seis meses sin papá. Pedimos justicia para que él pueda descansar en paz”, deslizó Mariana.
Por su parte, el papá de Nahuel, sólo dijo que no cae que murió su hijo. “De a ratos estoy bien, de a ratos estoy mal. No lo podes comprender. Yo no caigo que se me fue mi hijo. Quiero justicia por mi hijo, para que no haya un Nahuel más en el país”, sintetizó.
