El Gobierno nacional anunció en los últimos días un cambió en la dinámica de contralor del etiquetado de las prendas importadas: hasta ayer, la indumentaria que era observada por su etiqueta quedaba guardada en depósitos alquilados hasta que se pudiera saldar esa falta. A partir de ahora, pese a llamarle la atención al importador, los bultos podrán pasar y comercializarse más allá de esa situación, si así lo decide la secretaría de Comercio.
Para Guillermo Fasano, referente de la Cámara Textil de Mar del Plata, la medida “no es gran cosa”. “Lo trascendente acá es la señal que da, cómo marca camino o da referencia al modo en que van a dejar importar prendas”, advirtió el empresario, que confió estar más preocupado por la falta de políticas de exportación para el sector “que por lo que dejen hacer a los que vienen de afuera”.
“Hay que poner la medida en contexto, porque los títulos fueron muy impactantes y hubo mucha repercusión. Lo que hizo el Gobierno, poniendo a Comercio al frente de la decisión de si esas prendas siguen curso a comercialización o no, es facilitar el comercio internacional. Y eso es algo que habían dicho que querían hacer y no renegamos por eso. Sentimos que es una señal muy clara de que están abriendo la importación, de que la están facilitando. Por eso decimos que la medida no es trascendente, sino que lo trascendente es la señal”, diferenció Fasano, en diálogo con Mi8.
En esa misma línea, el dirigente dijo que ahora “hay que ver qué hace el sector, que está complicado y que nota la caída del consumo del mercado interno”. “Nosotros no estamos en contra de la importación, de hecho muchos de nuestros insumos vienen de afuera. El tema es no generar condiciones sin reforzar o darle alternativas a la industria local. Por eso seguimos exigiendo medidas que nos habiliten y acompañen a la exportación”, deslizó Fasano, que de todos modos admitió que esa política no sería de cuidado y protección de toda la industria, sino “de los que más espalda tienen”.
“Son semanas cruciales, hay que ver en qué se transforma esta señal. Nuestra mirada sigue siendo la misma que le planteamos a Fernando Muro y a Guillermo Montenegro en marzo: todo el impacto que ha producido el cambio de Gobierno es una caída del consumo fenomenal y eso que todavía no ha impactado lo que han prometido, que es una apertura del mercado internacional. Traer prendas terminadas, traer insumos. Si eso ocurre sin posibilidad de exportar va a estar complicado”, completó Fasano.
